Hay silencios que hablan por sí mismos
y palabras que ocultan universos;
silencios que calcinan
y sonidos imperceptibles.
Los silencios son pausas necesarias
en el tránsito de la vida;
mas se vuelven suplicios intensificados
cuando son perennes.
te hace tragar tus miedos, tus enojos, tus tristezas,
te corta fino cual navaja recién usada
te mata poco a poco o te hacer renacer.
Ese silencio tuyo...
¡es tan mío!
© APOLO