viernes, 14 de septiembre de 2007

Triángulo Sagrado



¿Porqué cuando te busco y te ansío
en las profundidades de tu triángulo sagrado,
no sólo encuentro placer y amorío,
sino también un poco de pecado?

¿Acaso me limita disfrutar el cáliz santo
la historia de mi vida, que es la historia humana,
la culpa y el desierto que a veces temo tanto,
o las tempestades que podrían venir mañana?

Tu triángulo es mi fuente y mi delirio,
Mis ansias y mi pasión mortal,
Dejar de contemplar tu esencia es un martirio.

Puente hacia la vida, espacio matricial,
Tan puro como las gotas del rocío
Y tan necesario como el aliento vital.

© Apolo

Amarte como yo Te Amo



Amarte como yo te amo,
no conoce de fronteras ni de limitaciones,
no exige de contratos ni rutinas,
no nos ata, ni nos aprisiona.

Amarte como yo te amo,
más que un acto de la naturaleza,
es un llamado a ser felices,
a unir las semillas de nuestras entrañas
para que florezca la pasión sagrada.

Amarte como yo te amo,
es descubrir las conexiones invisibles
entre nuestra mente y nuestros cuerpos,
es esa energía vital que fluye
como materia-espíritu inacabado.

Amarte como yo te amo,
despierta cada mañana el universo,
nos hace trascender en éxtasis
y experimentar el placer más divino,
que nos junta el cielo con la tierra.

© Apolo

Estos Sentimientos Míos



Estos sentimientos míos
no pueden ser más exactos
ni más intensos
que cuando miro tus ojos.

Esa dulzura en tu mirar
Que añoraba cada amanecer
Se me ha perdido en el tiempo
y se me hace cada vez más lejana.

Sin embargo, te sigo amando;
sigo esperando una vuelta del destino,
algún acontecimiento que nos una
y que nos haga sentir el mismo afecto.

© Apolo

Vivir si Muero



Si quieres dejo de escribirte
y muero en un instante.
Si quieres dejo de sentir la vida
que se me escurre por los dedos.
Si quieres cierro este capítulo inconcluso
Y me vuelvo a los avatares cotidianos.

Si quieres dejo de escribir,
pero no me quedaré inerte.
Muero para ser resucitado,
en la misma historia, o en otra diferente.

Vivir si muero, morir cuando vivo,
es un ciclo inextricable y eterno,
es un constante devenir y un retorno
tan misterioso como mi alma.

Dime si he de morir en este instante
y en este mismo tiempo moriré.
Dime si he de vivir estos espacios
y viviré aquí y por siempre.

© Apolo

Esta Tarde Lluviosa



Esta tarde con la lluvia dejarás tu huella.
Cada gota que revienta sobre la hierba
me recordará esos pocos momentos de duda;
pero los días felices serán como la brisa
que ahora se introduce por las rendijas de la ventana
acariciándome con delicadeza y ternura.

Esta tarde lluviosa me traerá el recuerdo de tu piel mojada
de tus besos húmedos y la sed de mi boca.
Esta tarde lluviosa me dirá que mañana habrá un sol,
que estamos tejiendo una historia compartida,
que estamos conectados con la vida
y que la vida nos quiere envolver a sus esencias.

Esta tarde lluviosa será inolvidable... porque aún estás presente.

© Apolo

Qué has Hecho para Cambiar mi Mundo



¿Qué has hecho para cambiar mi mundo?
¿Qué he provocado en ti y en tu corazón?
¿Qué ángel o demonio nos ha envuelto en su manto?
¿Qué instinto natural o trascendente se apoderó de nosotros?

Una y mil preguntas me rondan cada instante.
Se acumulan sin encontrar respuestas acertadas.
Cada interrogante es una espiral misteriosa
que va tejiendo una trama interminable.

No hallo respuestas hasta caer en tus pupilas;
esos ojos de una profundidad intensa
y esas manos que asemejan atractores cálidos,
que me revelan tus causas y tus azares.

© Apolo

Quiero que Aprendamos a Vivir



A veces te busco y no te encuentro,
a veces me buscas y no estoy,
a veces cuando el sol nos da la vida
volvemos a despertar los besos.

A veces voy contando los minutos
que me separan de ti
y se me hace un nudo en la garganta
y voy buscando más excusas
para saber dónde te encuentras.


Quiero que aprendamos a vivir
uniendo nuestros ojos, nuestras manos
tras esos muros silenciosos
que nos comunican con su luz.

Será tan real como la luna o las estrellas
que no podemos acariciar,
pero sabemos que contienen
una semilla de nuestra propia vida.

© Apolo